Este perfume de Loewe es la alegoría de un árbol misterioso y fascinante, desde sus raíces hasta sus ramas.
Las notas de salida incluyen frutas cítricas frescas, brillantes y espumosas, bergamota italiana y mandarina de Calabria, y un toque de cardamomo.
El majestuoso sándalo indio es el centro de esta noble y hermosa composición. Su lado seco se destaca por una singular cuerda de madera mediterránea elaborada con cedro y ciprés que nos hace viajar a un denso bosque. El vetiver acompañado de semillas de zanahoria aporta frescura, originalidad y masculinidad al corazón.
Las notas de fondo de la composición, como la base de este imponente árbol, huelen a tierra húmeda de la que salen las notas primaverales del pachulí. La textura cremosa y sensual es impulsada por el almizcle blanco aterciopelado, la lujosa ambreta y la faceta iridiscente de violeta.
Un diseño sencillo y elegante, sin artificios, donde la naturalidad reside en todos los elementos: una gorra de madera orgánica y colores del amanecer.
Notas olfativas
Cabeza
bergamota
cardamomo
vetiver
Corazón
sándalo
ciprés
esencia de semilla de zanahoria
Fondo
almizcle
esencia de violeta
Pachulí indonesio
Familia olfativa
Almizcle
Leñoso